Un adolescente de 14 años murió de un impacto de posta de goma en el cuello cuando era perseguido por policías en la ciudad de Corrientes, y por el hecho fueron detenidos e incomunicados 12 agentes.

Los testigos del barrio Pío X de la ciudad de Corrientes explicaron que uno de los policías le disparó al adolescente a menos de dos metros de distancia cuando ya estaba reducido, y la madre del chico asesinado contó a la prensa que los policías se confundieron y que lo persiguieron por error.

Una vez conocido el hecho, el gobernador de Corrientes, Ricardo Colombi (UCR), se reunió con el jefe de la policía provincial, Juan Alfredo Ojeda, para analizar la situación, y el ministro de Gobierno y Justicia, Gustavo Valdés, calificó el hecho como "un desafortunado episodio".

El hecho ocurrió cerca de las 16.30 de ayer en el barrio Pío X de la ciudad de Corrientes, cuando los policías comenzaron a perseguir a Ezequiel Riquelme, a quien acusaban de haber asaltado y robado a una mujer.

Según la investigación, los policías de la comisaría 12a. persiguieron al chico hasta una casa, donde lo redujeron y, por motivos que se desconcen, le dispararon un tiro en el cuello.

El chico herido fue trasladado al Hospital Pediátrico de la ciudad de Corrientes, donde agonizó varias horas hasta que falleció esta madrugada.

El hecho está siendo investigado por la fiscal de Graciela Fernández Contarde, que dispuso el secreto de sumario, aunque trascendió que 12 efectivos policiales fueron detenidos e incomunicados por su presunta participación en el hecho.

El padre del chico aseguró que su hijo "estaba indefenso, quietito en el piso, y le dispararon como a un animal. Después lo llevaron arrastrado como a una bolsa de papa. No tenía ni 50 kilos, no tenía ningún arma. Él se entregó. ¿Cómo le van a disparar así?", se preguntó.

Los familiares de Ezequiel Riquelme, quien dentro de siete días cumpliría 15 años, esperaban esta tarde la entrega del cuerpo, que fue sometido a una autopsia.