Cuatro delincuentes armados ingresaron a robar a una casa del barrio porteño de Villa Urquiza, sorprendieron y maniataron a los moradores de la vivienda y finalmente escaparon, según relató una de las víctimas.

Se trata de Silvia Bartolo, quien ayer alrededor de las 15 se encontraba acostada en la habitación de su casa, ubicada en Juan José Quesada 4646 de Villa Urquiza, viendo la televisión junto a su pequeño nieto cuando fue abordada por un ladrón armado. El delincuente se acercó a la cama, le indicó que estaban asaltando la propiedad y que se levantara rápidamente o le dispararía al niño.

"Tengo a toda tu familia en el patio, levantate porque lo quemo", dijo Silvia que le ordenó el delincuente, luego de lo cual bajó con su nieto hasta el lugar donde habían reunido a los demás miembros de la familia; su esposo, su cuñado y su hija.

Según dijo la dueña de la casa, allí otros tres delincuentes, todos a cara descubierta, tenían maniatados a los dos hombres, les decían que habían obtenido el dato de que tenían dinero en la casa y les exigían que lo entregaran.

"Nos decían 'esto es una batida, sabemos que tienen plata' y empezaron a revolver todo", relató Silvia, quien agregó que luego de recorrer toda la propiedad y no haber podido hallar lo esperado, uno de los delincuentes regresó, hizo levantar a su marido y lo obligó a acompañarlo en busca del dinero.

Finalmente, luego de una media hora y tras haber obtenido tan sólo una notebook, algunas alhajas y alrededor de 1.200 pesos que los Bartolo tenían destinados "para las vacaciones", uno de los miembros de la banda entendió que no encontrarían más dinero y comenzó a decirles a sus cómplices que era hora de irse.

Luego de que los ladrones dejaron a los hombres maniatados y escaparon, las víctimas se comunicaron con la comisaría 49na., con jurisdicción en la zona, cuyos efectivos se presentaron en la casa.

Si bien las autoridades dispusieron inmediatamente poner en marcha un operativo cerrojo en el área para dar con los delincuentes, no obtuvieron resultados y esta mañana aún eran buscados intensamente.

Allí, según dijo Silvia, los policías constataron que los delincuentes habían ingresado por la puerta del frente de la casa sin violentarla, por lo que los pesquisas investigan si utilizaron algún juego de llaves ganzúa. "Vivimos en una casa antigua que estamos reparando de a poco, no sé por qué nos robaron a nosotros. Por suerte no tengo que ser protagonista de una noticia trágica", finalizó Silvia.