El encargado del edificio en el que vivía Angeles Rawson quedó detenido esta madrugada acusado del homicidio de la adolescente, luego de la declaración durante más de 14 horas de los familiares de la víctima. El detenido, identificado por los investigadores como Jorge Mangeri (45), fue llevado cerca de las 6 de la madrugada a la sede de la División Homicidios de la Policía Federal, en el barrio de San Telmo, y será indagado entre esta tarde y el lunes próximo por la fiscal del caso, Paula Asaro.

Mangeri había sido trasladado a la fiscalía de Asaro anoche cerca de las 21, cuando la madre y los hermanos de Angeles ya hacía ocho horas que se hallaban declarando. El hombre había trabajado como encargado del edificio de Ravignani 2360, de Palermo, hasta el último lunes, día en que desapareció Angeles y fue asesinada.

Ese mismo día, Mangeri llamó al consorcio del edificio y dió parte de enfermo por unas anginas y, desde entonces, se lo había dejado de ver en el edificio, en el cual vivía junto a su esposa en un departamento del último piso. Los investigadores de la División Homicidios ya venían siguiendo los pasos del encargado y las sospechas sobre él crecieron cuando ayer no se presentó a trabajar, a pesar de que ya tenía el alta médica.

El encargado llegó anoche a la sede policial como testigo y comenzó a declarar bajo juramento ante la fiscal, pero en cierto momento del relato, todo cambió. Si bien no trascendió su declaración, los pesquisas explicaron que Mangeri se autoincriminó en el hecho y la fiscal lo relevó del juramento de decir verdad, lo imputó en la causa y quedó detenido.

Inmediatamente la fiscal solicitó la declaración de la esposa de Mangeri, con quien vivía en el octavo piso del edificio de Ravignani, y su testimonio fue de vital importancia, dijeron las fuentes. En simultáneo, mientras la fiscal tomaba las declaraciones testimoniales, detectives de la División Homicidios volvieron al edificio en el que vivía Angeles con su madre, su padrastro y sus hermanos.

Esta vez, los policías se dirigieron al departamento de Mangeri y a un sótano donde el encargado guardaba sus herramientas y útiles de trabajo en el edificio. De allí la policía se llevó elementos de prueba para la causa. Además, la policía realizó una inspección sobre el automóvil de Mangeri, un Renault Megane color gris modelo 1999, al que se le extrajeron las alfombras para ser peritadas en busca de pelos o rastros de Angeles. Luego de ser analizado por personal de la Policía Científica, el auto fue trasladado a una dependencia policial.

Es que los investigadores sospechan que en ese auto pudo haber sido trasladada la niña ya estrangulada y con una bolsa en la cabeza hasta un contenedor de basura, al que fue arrojada. Tanto la madre de Angeles, María Elena Aduriz, como sus hermanos Juan Cruz y Jerónimo, su abuela María Inés y su padrastro Sergio "Pato" Opatowski, se retiraron de la fiscalía pasadas las 2 de la mañana con destino incierto.

La fiscal Asaro ordenó esta madrugada mantener detenido al encargado hasta el próximo lunes, cuando será la indagatoria.