La Justicia marplatense dictó este lunes la prisión preventiva de Julián Ramón, el joven detenido como sospechoso del crimen de su cuñado, el niño Gastón Bustamante, de 11 años, asesinado en su casa de Miramar en noviembre último.

El defensor de Ramón, Alejandro Borawski, informó a Télam que la jueza de Garantías de Mar del Plata, Rosa Frende, dispuso que el acusado cumpla la prisión preventiva en su domicilio y bajo el monitoreo de una pulsera electrónica.

La medida fue consentida por el fiscal de la causa, Rodolfo Moure, aunque desaprobada por la familia del niño asesinado, que cuenta hasta el martes 10 próximo para apelarla o, de lo contrario, Ramón accederá a ese beneficio, añadió el letrado.

En la resolución, la jueza Frende expresó que la prueba reunida contra Ramón no tiene el grado de contundencia necesario como para poder llevarlo a juicio, por lo que se mostró flexible al otorgarle una morigeración de la prisión preventiva.

“Se le imputa el delito de homicidio calificado de un menor de edad”, subrayó la ayudante de la Fiscalía centralizada de Balcarce, a cargo de Rodolfo Moure, quien está de licencia.

Principal hipótesis. “El primer elemento son las huellas dactilares del acusado sobre un televisor que se encontraba dentro de la casa y estaba preparado para ser sustraído por la persona que ingresó, presuntamente, con fines de robo”, resaltó Laura Molina.

“No se descarta ninguna hipótesis; la medida de prisión preventiva es de coerción, no se trata de una resolución final”, aclaró la ayudante de fiscalía.

“La carátula se agrava porque el crimen se cometió para encubrir otro delito”, enfatizó Molina en Antes que Mañana.