El juez federal Sebastián Casanello ordenó este jueves la inhibición general de los bienes de Leonardo Fariña y del financista Federico Elaskar, en las diligencias de la causa por presunto lavado de dinero en la que fueron imputados junto con el rempresario Lázaro Báez.

El magistrado solicitó además que se realice un careo entre Sergio Tribiño, quien trabajaba para Báez y se sospecha que desarmó una bóveda en su chacra de Río Gallegos y los integrantes del matrimonio que habrían aportado a la justicia las fotos de esos hechos.

El careo fue pedido para aclarar el episodio, ya que en su declaración judicial Triviño negó los hechos mientras que el matrimonio ratificó que aquel les había dado las fotos que mostraban su trabajo en la bóveda para guardarlas.

Ambos imputados revelaron en el programa “Periodismo Para Todos” que integraron maniobras de lavado de dinero de unos 55 millones de euros de Báez, aunque luego se desdijeron.

Los bienes de Fariña ya habían sido inhibidos en abril por la justicia federal de La Plata a causa de deudas de IVA e Impuesto a las Ganancias y Casanello le solicitó a su par bonaerense que le informe en caso de levantar la restricción.

Casanello, además, dispuso el ingreso al Plan Nacional de Protección de Testigos del Ministerio de Justicia de Maximiliano Acosta, testigo de casamiento de Fariña con la vedette Karina Jelinek, que este miércoles declaró ante el fiscal Guillermo Marijuán.

Acosta declaró que fue intermediario de Fariña en la compra del campo “El Entrevero”, en Punta del Este, por 14 millones de dólares, que finalizó con la titularidad de Daniel Pérez Gadin, ex contador de Lázaro Báez.