El Tribunal, integrado por Liliana Torrisi, Silvia Hoerr y Claudio Bernard, condenó, con el voto en disidencia de éste último, a la pena de prisión perpetua a ambos hombres por el delito de "homicidio criminis causae” (matar para lograr la impunidad).

El 30 de marzo de 2011, Moretto y su mujer fueron a una estación de servicio ubicada en 137 y 38 de La Plata a comprar pañales, cigarrillos y golosinas y al retirarse del comercio oyeron que se acercaba a ellos una moto.

Dos asaltantes encapuchados interceptaron a la pareja, y mientras uno de los ladrones apartaba a la mujer a un costado, su cómplice obligó a Moreto a tenderse en el piso, mientras la exigía la entrega de dinero.

Se presume que en ese momento, Moreto le habría gritado a la mujer que corriera, lo que alteró a uno de los ladrones, al que se le habría corrido la capucha, lo que lo llevó a aplicar varias puñaladas a Moreto.

Los ladrones escaparon llevándose dos pesos, unas golosinas que había comprado la pareja y un teléfono celular; en tanto Moreto falleció.

Otro hombre que había llegado a juicio detenido, Nicolás Bondaruk, acusado de tener en su poder objetos robados de los dos condenados, fue absuelto.