Los trabajadores de McDonald's en tres estados de Estados Unidos, Nueva York, Michigan y California, han presentado demandas contra la empresa alegando que estaba "robando" salarios.

Los demandantes aseguran haber sido forzados a trabajar horas extra sin haber sido recompensados.

Los trabajadores de Nueva York aseguraron que no les fue reembolsado el coste de limpiar sus uniformes, lo que deja sus salarios por debajo del mínimo, afirmaron.

La compañía declaró que estaba comprometida a tratar a sus empleados de una forma justa y que estaba "revisando las demandas".

Las compañías de comida rápida se han visto bajo creciente presión por subir salarios, y los trabajadores de algunas de ellas han llevado a cabo huelgas en los últimos meses.