El ejército sirio atacó la ciudad central de Homs después de que destacados líderes opositores rechazaron el domingo la propuesta gubernamental de establecer un diálogo para buscar una solución al conflicto. El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, con sede en Londres, denunció que una persona murió y 20 resultaron heridas cuando las tropas entraron con vehículos blindados y dispararon en varios barrios de la ciudad.

La operación de hoy fue la más grande en la tercera ciudad de Siria desde que comenzó la represión de las protestas en demanda de una apertura democrática en un país gobernado desde 1963 por un solo partido. También en otras zonas se oían fuertes disparos. La ciudad está bajo toque de queda y la electricidad fue cortada en las calles principales, según los CLCS.

Los grupos de derechos humanos denunciaron que murieron más de 1.400 civiles y 350 miembros de las fuerzas de seguridad, y que fueron arrestadas unas 12.000 personas desde que las protestas comenzaron en marzo en demanda de la renuncia del presidente Bashar al Assad.