La céntrica plaza Tahir de El Cairo fue epicentro nuevamente este viernes de una multitudinaria manifestación en la que miles de egipcios exigieron al Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas que no eluda su compromiso y cumpla el plazo para la entrega del poder a un gobierno civil, previsto para el 30 de junio.

La masiva protesta se produce cuando el país está inmerso en una creciente tensión política y una escalada de violencia, agravada por la muerte de once personas en una manifestación frente a la sede del Ministerio de Defensa en El Cairo el pasado miércoles.

Los manifestantes enarbolaron hoy pancartas con el lema "Abajo el régimen militar" y reclamaron "la defensa de la revolución y el fin del derramamiento de sangre", según informó la cadena de televis.

Entre los congregados había simpatizantes de los Hermanos Musulmanes, del movimiento salafista y de los grupos políticos liberales, incluido el movimiento activista 6 de Abril.

Estas mismas facciones anunciaron su intención de unirse a las protestas convocadas en Alejandría, segunda ciudad del país.

El candidato de los salafistas, Hazem Abu Ismail, fue proscripto de las elecciones presidenciales, cuya primera vuelta se celebrará el 23 y 24 de mayo, debido a que su madre tenía doble nacionalidad egipcia y estadounidense.

Hazem Abu Ismail, candidato del partido salafista Al Nur, logró casi un 25% de los escaños en los comicios legislativos (los Hermanos Musulmanes consiguieron un 43% de las bancas).

La última encuesta del Centro Al Ahram para Estudios Políticos indicó que el ex secretario general de la Liga Arabe, Amro Musa, encabeza las preferencias, seguido por Abul Futuh, quienes se enfrentarían en una eventual segunda vuelta, prevista para el 16 y 17 de junio, en caso de que ninguno de los dos logre la mayoría absoluta.

Musa obtuvo el respaldo del 41,1% de los 1.200 encuestados y Abul Futuh, de tendencia islamista moderada, logró un apoyo del 27,3%.