En respuesta a las últimas acusaciones del Comité de Investigación de Rusia acerca de que se habrían encontrado drogas ilegales a bordo del Arctic Sunrise, Greenpeace difundió la siguiente declaración:


Sólo podemos suponer que las autoridades rusas hacen referencia a los suministros médicos que nuestros barcos están obligados a tener en virtud de la legislación marítima.

El barco fue registrado por primera vez por oficiales rusos hace semanas, recorrieron todos los rincones; por lo tanto, asumimos que este anuncio está armado para desviar la atención de la creciente indignación mundial sobre el encarcelamiento de los detenidos.

Cualquier reclamo sobre la aparición de drogas ilegales, es una mentira, pura y simple.

Greenpeace posee una estricta política en contra de las drogas llamadas “de uso recreativo” en sus barcos y cualquier reclamo de que se encontró algo que no sean suministros médicos debe considerarse con sospecha. Antes de salir de Noruega por el Ártico ruso, el barco fue registrado por un perro rastreador de las autoridades noruegas, como es habitual. Las leyes de Noruega se encuentran entre las más estrictas del mundo, y no se encontró nada elegal a bordo del barco.

El Arctic Sunrise es territorio soberano holandés, fue capturado en aguas internacionales, y por lo tanto está sujeto a la legislación vigente en Holanda. Es ilegal navegar en un barco de bandera holandesa sin los suministros médicos adecuados que considera la ley de dicha nación.

El barco llevaba a bordo un médico calificado con más de diez años de experiencia en los hospitales rusos. Ciertos suministros médicos se mantienen en una caja fuerte a la que sólo el capitán y el médico tienen acceso. Sabemos que la caja fuerte fue allanada por las autoridades rusas. Podemos suponer que estos son los suministros médicos a los que los servicios de seguridad rusos hacen referencia.