El reactor 1 de la central japonesa de Fukushima, uno de los más dañados por el terremoto y tsunami del 11 de marzo de 2011, será examinado por primera vez con la ayuda de un robot por control remoto. Tokyo Electric Power (TEPCO), la operadora de la planta, enviará el robot a inspeccionar la unidad los próximos 10 y 13 de abril para medir los niveles de radiación y la temperatura en el interior, así como para tomar imágenes. 

El operador cree que el combustible de los reactores 1, 2 y 3 de la central se fundió a través de las vasijas de presión de los reactores y se estuvo acumulando en los contenedores exteriores, sin embargo, poco se sabe al respecto cuatro años después de la crisis nuclear, dados los altos niveles de radiación.

En octubre de 2012 los niveles de radiación en el interior de la vasija, que los operarios de Fukushima midieron bajando un dosímetro, marcaban 11 microsievert por hora (mSv/h), muy por encima de los cerca de 0,11 mSv/h del límite recomendado. Debido al terremoto y al tsunami producidos en 2011, varios núcleos de los reactores de la central atómica se fundieron y la liberación de radiación obligó a las autoridades a evacuar a decenas de miles de personas, mientras la situación dista de estar bajo control y existen denuncias de que el agua contaminada se filtra al mar.