"Fueron transgredidos todos los principios de la defensa”, sostuvo Fernando Lugo, al comenzar su discurso tras su destitución en manos del Congreso de Paraguay.

“Siempre actué en el marco de la ley, aunque esta fue torcida. Me someto a la decisión del Congreso”, remarcó el ahora ex jefe de Estado.

“A los ciudadanos, que no se les niegue el derecho de manifestar su opinión. Llamo a manifestarse en forma pacífica, que la sangre de los justos no se derrame nunca más por causa de intereses mezquinos en nuestro país”, dijo Lugo.

“Tras cuatro años, me despido como presidente de la República, pero no como ciudadano. Serviré a la nación cuando me necesiten”, agregó.

Fernando Lugo “no responde a las claques políticos ni a la mafia. Seguiré respondiendo a los compatriotas más necesitados. Tenemos un deber con nuestra historia”.

Asimismo, el ex mandatario agradeció “profundamente a todos los paraguayos que pusieron su hombro, su tiempo para consolidar esta democracia”. Lo hizo con su banda presidencial sobre la mesa contigua a su persona.

También agradeció a “los compañeros de la prensa, quienes ayudaron a consolidar la historia de la democracia paraguaya”.

“Salgo por la puerta más grande de la patria: la del corazón de mis compatriotas”, dijo el ex obispo.

“A los que sueñan con un Paraguay diferente, siempre pueden seguir contando con Fernando Lugo”, enfatizó, para luego despedirse con un “¡Viva el Paraguay!”.