El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero limitará el uso del velo integral o burka en los espacios públicos de toda España.

La medida estará contemplada en la futura ley de libertad religiosa, que regulará entre otras cosas la presencia de símbolos religiosos en los espacios públicos, explicó el ministro de Justicia español Francisco Caamaño.

La burka o niqab es una vestimenta que recubre completamente el cuerpo de ciertas mujeres musulmanas, disimula los ojos detrás de una raja y que algunos consideran que excede lo religioso para convertirse en símbolo de sumisión.

El uso de la burka "no es uno de los grandes problemas" de España, dijo el ministro, pero aclaró que es una prenda "difícilmente compatible con la dignidad del ser humano, además de con la identificación" de la persona.

El anuncio de Caamaño se produce un día después de que Barcelona, la segunda ciudad española después de Madrid, anunciase su prohibición en los edificios e instalaciones pertenecientes al ayuntamiento, tales como mercados, bibliotecas o centros culturales.

Otras tres localidades catalanas -Lérida, El Vendrell y Tarragona- establecieron el mismo veto, abriendo el debate sobre el uso del velo integral en España. La localidad malagueña de Coín, en el sur del país, pretende hacerlo también.

La burka, dijo Caamaño en el Ministerio de Justicia, "no respeta la dignidad del ser humano y, particularmente, la dignidad de la mujer",