La dirigente del PT también puso de relieve el aumento "constante" del poder de compra de los salarios y la creación de más de 20 millones de empleos formales desde 2003, cuando asumió su antecesor y fundador del partido, Lula Da Silva.
En la última semana, en coincidencia con la entrada en campaña de Silva, elegida tras la muerte del candidato inicial del Partido Socialista Brasileño (PSB), Eduardo Campos, Rousseff reforzó en sus discursos las conquistas sociales de su partido.

“Antes del gobierno de Lula, la población de menos recursos no podía estudiar, pero en los últimos 12 años esto cambió, ya que existe el Pronatec (Programa Nacional Enseñanza Técnica) que es gratuito y llega a millones de personas", destacó la mandataria.

El equipo de campaña de la presidenta analiza estrategias frente al nuevo escenario y estudia abandonar el discurso de polarización contra el Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), que podría tener el efecto de beneficiar a la candidatura de Silva, consigno el sitio Brasil247.

En paralelo, se supo que Silva -segunda en los sondeos- buscará el apoyo de los ex presidentes Lula y Cardoso, si gana las elecciones, según reveló uno de sus asesores.

Eduardo Giannetti da Fonseca, considerado el "gurú" económico de Silva, anticipó que si se impone en los comicios del 5 de octubre o en el balotaje del 26 con quien van “a gobernar” Silva y con quien negociará, “es con Lula y Cardoso".

"A nosotros nos encantaría traer al gobierno a los excelentes técnicos que hay en el PT y en el PSDB; nuestra idea es gobernar con los mejores hombres en la política y en la gestión", indicó Giannetti da Fonseca al diario Folha de San Pablo.

El candidato del PSDB, Aecio Neves, a su turnbo, consideró que “no es un buen comienzo para quien tiene que presentar propuestas” la palabra del asesor de Silva y evaluó que aunque se tengan de referencia cuadros de otros partidos, lo que va a “predominar es el software original” de Silva, citó el mismo diario local.

Esta nueva postura de Silva se chocó con las críticas del sábado a Rousseff, en su primer acto público, en Recife, Pernambuco.

En alusión al eslogan implantado por Lula durante la campaña que llevó a Rousseff a la Presidencia, "Dilma, la gerenta de Brasil", la líder ecologista rechazó la idea de que para ser buen presidente se debe ser buen "gerente" y rebatió la idea de la mandataria de que para bajar la inflación habría que recortar recursos destinados a programas sociales.

"Esto es una cuestión de opciones. El problema es que hay gente que no quiere cambiar las opciones", agregó Silva, quien se unió a los socialistas el año pasado porque no pudo inscribir su partido Red de Sostenibilidad (Rede) para disputar los comicios, irrumpió en la campaña y obligó a modificar estrategias tanto al oficialismo como al resto de las fuerzas.

Pero ayer una noticia puso en alerta a la reciente candidata cuando la Policía Federal (PF) reveló que investiga la hipótesis de que la avioneta en que se mató hace dos semanas Campos fue adquirida en forma irregular, lo que puede derivar en la anulación de la postulación de Silva.

La PF indaga si la aeronave, valuada en poco más de ocho millones de dólares, fue comprada con dinero no declarado por el PSB o directamente por Campos a través de testaferros.

Silva rehusó responder preguntas sobre el tema, mientras su compañero de fórmula, el diputado Beto Albuquerque, remarcó que la PF "tiene que investigar antes de hablar".

La principal sospecha es que se haya utilizado dinero no declarado, lo que, de haber ocurrido, significaría una transgresión a la legislación electoral y puede tener como consecuencia la anulación de la candidatura de Silva.

Sobre el hecho, el socialdemócrata Neves sostuvo que "todos los hombres públicos tienen que estar preparados para responder sobre todo, y "este es un problema sobre el que el PSB va a tener que responder".

Otro problema que se sumó a la campaña de Silva es que Albuquerque, su vice, fue señalado como contrario a la línea antibélica de la ex senadora, porque recibió en la campaña de 2010 una donación de 30.000 reales (unos 13.000 dólares) por parte de la Asociación Nacional de la Industrias de Armas y Municiones (Aniam).

Recientemente, la candidata reiteró ante el partido su postura sobre las donaciones de campaña. "Establecimos que no íbamos a recibir ningún tipo de donación de la industria de tabaco ni de la industria bélica,", aseguró.

Albuquerque, por su lado, dijo al diario Valor que Silva “sabe" de la donación. "Ella no vino al PSB a convertirse en PSB, y nosotros no nos aliamos a la Rede (la agrupación de Silva) para ser de Rede. Somos de partidos diferentes", indicó.