La policía catalana reprimió con bastones y balas de goma la manifestación de los estudiantes universitarios, quienes protestan contra los recortes que en materia de educación implementan los distintos gobiernos regionales.

Los estudiantes, que cifraron la movilización en 70.000 personas, prendieron fuego volquetes con distintos elementos en su interior e incluso un automóvil que estuvo cerca de explotar si no intervenían con rapidez los bomberos, en la Gran Vía, a 200 metros de la Plaza Catalunya, en pleno centro de Barcelona.

Frente a esta situación intervinieron al menos 20 carros de asalto policiales y cientos de efectivos que primero cargaron contra los manifestantes con sus bastones y luego comenzaron a disparar balas de goma, provocando corridas y desmanes.