El presidente de Armenia, Serge Sargsián, llegó al enclave separatista de Nagorno Karabaj, donde ayer se desató una nueva escalada de tensión con la vecina Azerbaiyán tras el derribo de un helicóptero militar armenio, al tiempo que ordenó el inicio de "maniobras tácticas" de toda la Armada en la región. Sargsián se desplazó en helicóptero a la capital del enclave armenio, Stepenakert, para reunirse con el líder de la proclamada república, Bako Saakian, informó la presidencia armenia.

El líder armenio, cuya visita se mantuvo en secreto hasta el último momento, inspeccionó varias guarniciones en el marco de las actuales maniobras militares conjuntas "Unidad'2014". Precisamente, Sargsián nació en Stepanakert y participó en la guerra que estalló entre armenios y azerbaiyanos tras la caída de la Unión Soviética (1991) por la soberanía de Nagorno (alto) Karabaj.

El Ejército azerbaiyano derribó ayer un helicóptero MI-24 de las fuerzas de Nagorno Karabaj, aduciendo que atacó las posiciones de Azerbaiyán en la línea de separación entre ambos bandos, donde rige un frágil alto el fuego desde 1994. El incidente es considerado el más grave con participación de la aviación militar ocurrido desde aquella declaración de alto el fuego en la zona, una de las más militarizadas del mundo.

En cambio, las autoridades separatistas sostienen que el helicóptero no estaba equipado con armamento y efectuaba un vuelo de instrucción cuando fue abatido con tres tripulantes a bordo. La Cancillería armenia calificó el incidente de "provocación sin precedentes" y amenazó con "penosas consecuencias" a Azerbaiyán, que respondió iniciando unas maniobras militares a gran escala.

El conflicto entre los dos países vecinos del Cáucaso Sur, que data desde sus propias constituciones como estados nacionales, se agravó durante los últimos tiempos de vida de la extinta Unión Soviética (URSS). Tras la desintegración de la Federación de Transcaucasia con la proclamación de la independencia de la República Democrática de Georgia (1918), Azerbaiyán y Armenia proclamaron su independencia el mismo día, 28 de mayo de 1918, pero ambos reclamaron territorios que consideraron histórica y étnicamente propios.

Esta disputa desató la llamada Guerra armenio-azerí una serie de conflictos que terminaron cuando el Ejército Rojo ocupó ambos países y fueron anexados a la URSS. En 1988, los armenios del Karabaj votaron para separarse y unirse a Armenia, lo que junto con las matanzas mutuas en Azerbaiyán y Armenia desató un conflicto conocido como la guerra de Nagorno-Karabaj que trajo más de 25.000 muertos.

La violencia provocó de facto el control armenio sobre Nagorno-Karabaj y siete regiones azeríes circundantes, que quedó paralizado de manera efectiva cuando ambas partes acordaron respetar un alto el fuego que ha estado en vigor desde mayo de 1994. Pese al alto el fuego, no menos de 40 enfrentamientos se registraron a lo largo de las líneas de conflicto de Nagorno-Karabaj. Recientemente, los presidentes de Armenia y Azerbaiyán, Ilham Aliev, reanudaron el diálogo sobre Nagorno Karabaj durante una cumbre organizada en París por el presidente francés, Francois Hollande.