Al menos 18 personas murieron, entre ellas seis niños, y otras dos estaban desaparecidas después de que una barca con refugiados se hundiera en el brazo de mar que separa las costas turcas de la isla griega de Lesbos, informó la prensa turca. Dos naves de las patrullas costeras salieron al rescate al recibir noticias sobre una embarcación de madera que se hundía ante las costas de Bademli, una localidad a 70 kilómetros al norte de Esmirna.

Los equipos consiguieron salvar a 21 personas, además de recuperar 18 cadáveres, y proseguían la búsqueda de otras dos personas que se hallaban en la barca, según testimonios de los supervivientes. En la búsqueda participan dos barcas y dos helicópteros turcos, y un equipo de buzos acudió al lugar para comprobar si había personas atrapadas en la cámara interna del barco.

No se ha informado sobre la nacionalidad de los refugiados, aunque quienes intentan alcanzar las islas griegas desde las costas turcas son casi siempre sirios, iraquíes y afganos que escapan a las guerras en sus países. Turquía alberga a unos 2,2 millones de sirios, 45.000 afganos, 100.000 iraquíes y 14.000 iraníes en busca de asilo.

Desde enero, casi 800.000 personas han alcanzado Grecia por vía marítima de forma indocumentada, pero se estima que más de medio millar han muerto en el intento. La migración se enmarca en la mayor crisis de refugiados desde la Segunda Guerra Mundial, que sólo este año ha visto llegar a Europa un récord de más de 1 millón de personas, en su mayoría refugiados de guerra, según cifras de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).