Unas 108 personas continúan desaparecidas y al menos ocho murieron tras el alud ocurrido el sábado en el estado de Washington, al oeste de los Estados Unidos, según datos de servicios de emergencia citados por el diario "Seattle Times".
 
"Se trata todavía de un dato impreciso", afirmó John Pennington, de los servicios de emergencias, quien según un despacho de la agencia alemana de noticias DPA consideró que "la cifra de víctimas no será tan elevada".
 
Por el momento se confirmó además la muerte de ocho personas a causa del corrimiento de tierra, ocurrido cerca del municipio de Osos, unos 100 kilómetros al norte de Seattle, capital del estado de Washington.
 
"La situación es muy desalentadora", afirmó el jefe de bomberos, Travis Hots, aunque consideró que "todavía hay esperanza de encontrar víctimas con vida".
 
El alud ocurrió el sábado, cuando parte de una montaña se derrumbó sobre al menos 30 viviendas, una carretera y un río en el condado de Snohomish.
 
La inestabilidad de la montaña de barro, piedras y escombros resultante del deslave, de unos cuatro metros, dificulta la búsqueda de los desaparecidos.