La actriz Martina Gusmán vive un presente laboral intenso: coprotagoniza el filme "Elefante blanco", de Pablo Trapero, que compite en el Festival de Cannes y llevó más de 150.000 espectadores a las 84 salas nacionales durante el fin de semana, mientras hace teatro y prepara un unitario para televisión.

La película dirigida por Trapero, en la cual Gusmán personifica a Luciana -una asistente social que comparte un arduo trabajo en las villas porteñas junto a dos sacerdotes (a cargo de Ricardo Darín y el actor belga Jérémie Renier)- fue exhibida con buena repercusión en la sección `Una cierta mirada` del Festival de Cannes.

"Transité ese festival desde diferentes roles, como acompañante de Pablo (Trapero, su esposo), como productora, como actriz, como jurado y la experiencia fue siempre enriquecedora y conforma una ventana para la salida internacional de una producción cinematográfica", dijo Gusmán en una entrevista con Télam.

Martina este año debió cancelar su viaje a Cannes por problemas de salud de su madre, pero no por ello dejó de acompañar la promoción de “Elefante blanco”.

“La película -confesó- significó una experiencia movilizadora por el vínculo que se generó con la gente de las villas durante las más de 12 semanas que demandó el proceso global del filme".

Sobre su papel en el largometraje, Martina señaló que "construir mi rol de Luciana fue un gran desafío, ya que ella tiene menor desarrollo y participación en la trama que los curas, pero desde ese lugar, con el menor poder que me tocaba, intenté reflejar una de las vivencias de colaboración más laicas de la historia".

Para darle carnadura a su criatura, Gusmán reveló que “me entrevisté con varias trabajadoras sociales porque la dinámica de su labor en la historia incluía cumplir con coordinar un grupo de rehabilitación para adictos”.

“Pero también, y en paralelo, las trabajadoras sociales se involucran con la cotidianeidad de la villa y son un link con el afuera", añadió la artista.

Quizá, lo que más conmovió a la protagonista de los filmes "Leonera" y "Carancho", fue "el nivel de frustración al que las asistentes sociales se enfrentan todo el tiempo e igual siguen adelante con un nivel de utopía y entereza que les permite atravesar sus crisis de fe tal como les sucede a los personajes", indicó.

Por fuera de “Elefante blanco”, la actualidad de Gusmán incluye estar de miércoles a domingo sobre el tablado del Picadilly (Corrientes 1524) donde integra el elenco de "Extraños en un tren".

La pieza teatral basada en la novela de Patricia Highsmith, apunta a recrear el suspenso y la comedia que logró en su película homónima el genial Alfred Hitchcock.

“Extraños en un tren”, que durante el verano hizo temporada en Mar del Plata, completa su elenco Gabriel Goity, Ludovico di Santo, Pompeyo Audivert, Alejo García Pintos y Adriana Aizemberg bajo la dirección de Manuel González Gil.

Gusmán piensa seguir haciendo teatro al menos hasta julio, época en la que tal vez inicie una coproducción cinematográfica con Italia.

"Estoy también empezando con un unitario para televisión, producido por Gastón Portal, que se llama "Babilon" y cuya trama -adelantó- se desarrolla en una suerte de club de jazz, casi un cabaret con una estética muy particular”.

La intérprete anunció que en cada una de las 13 emisiones de este policial negro que incluirá escenas en blanco y negro y sumará a Luis Luque, Federico Olivera y Norman Briski para completar el elenco, “asumiré a una cantante que está a cargo del lugar".