La cantante estadounidense Madonna y dos integrantes del grupo de punk ruso Pussy Riot abrirán un concierto organizado por Amnistía Internacional para protestar contra Vladímir Putin, presidente de la Federación Rusa, y declarar su compromiso contra cualquier tipo de discriminación. El mundo del rock volverá así a realizar un gesto de protesta contra Putin por los derechos de los homosexuales, justo en la vigilia de la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos invernales de Sochi.

El concierto de Madonna y las Pussy Riot se realizará el 5 de febrero en el Barclays Centre, pabellón deportivo ubicado en Brooklyn, Nueva York. Sin embargo, María Aliokhina y Nadezhda Tolokonnikova, integrantes del grupo punk, no van a cantar con Madonna en el escenario, según informó el marido de Tolokonnikova, Piotr Verzilov, quien aclaró que las activistas sí van a leer un discurso sobre "la situación política y los derechos humanos en Rusia".

Por su parte, Madonna expresó: "Tengo el honor de presentar a mis compañeras combatientes por la libertad. Siempre admiré su valentía y apoyé el compromiso y los sacrificios que hicieron en nombre de la libertad de expresión y de los derechos humanos", añadió la "reina del pop".

Tolokonnikova y Aliokhina, que fueron recientemente amnistiadas por las autoridades rusas y pudieron salir de la cárcel, habían sido condenadas por cantar en una catedral ortodoxa contra el presidente ruso. En el encuentro estarán también presentes celebridades de la música como Bob Geldof, el grupo Blondie y Yoko Ono, entre otros