Un gran escándalo iniciaron Annalisa Santi y Vicky Xipolitakis en Viviendo con las estrellas cuando Marcelo Polino les dijo que, de ahora en más, los noteros cambiarán de famoso y ellas dos deberán separarse.

Annalisa se negó a irse con Fabián Doman, su nuevo entrevistado, designado por la producción, y decidió ir un paso más allá para demostrar el amor que siente por la vedette, a quien conoce hace muy poquito, pero con quien logró forjar una amistad.

"Annalisa se tatuó mi nombre, se puso Vicu, como ella me dice", contó la primera vedette de Brillantísima a Teleshow.

Si bien al principio le dio gracia, luego entendió que era un gesto de amor: "Me reí y me gustó mucho porque es una reacción de cariño. Sé que me adora, que quiere ser como yo y que es mi fan. Ella es mi cachorra, la estoy haciendo para que triunfe y tiene todas las herramientas para hacerlo", comentó Xipolitakis.

Además, destacó que sigue en desacuerdo con la decisión de la producción de separarlas, aunque recibió a Anabel, su nueva notera en el reality: "Hoy me llegó la nueva, es una rotación que hizo el programa. Pero mi notera es Annalisa, esta nueva que es la que tenía Doman me tocó a mí, le abrí las puertas de casa para no echarla porque me llegó y no soy maleducada, pero en el momento de reconfirmar la echo así vuelve Annalisa, que esa es mi polla. Yo quiero a Annalisa, que es la mía. Las demás que me quieran poner no me importan. La mía es Annalisa, que es mi cachorra. ¿La estoy haciendo yo para que después se la coma otro? No. Es un producto mío, arranca conmigo y termina conmigo".