En un comunicado publicado en el sitio oficial, el club rechazó "el incidente" cometido por el hincha e informa que gracias a las "fuerzas de seguridad" y de la "colaboración" del público presente se lo localizó y se tomó esa determinación.

"Villarreal muestra su absoluto rechazo a cualquier acto que vaya en contra de dichos principios como la violencia, la discriminación, el racismo o la xenofobia", agrega el mensaje.

El defensor brasileño de Barcelona comió un trozo de la banana que le lanzaron al campo de juego con intención de igualarlo con un simio por su origen étnico, durante un partido correspondiente a la liga española de fútbol.