Juan Román Riquelme tiene las cosas claras. Es consciente del déficit futbolístico de Boca y admite que el grupo está especialmente preocupado por la dificultad de ganar en la Bombonera. “Para ganar la copa tenemos que mejorar de local”, admitió el ídolo del club.

“Nos duele que otros equipos jueguen tranquilos en nuestra casa”, admitió Riquelme. Y advirtió: “La copa empieza en el mano a mano. Esperemos poder clasificarnos y llegar mejor de lo que estamos”.

El enganche también se sinceró al decir: “Todo el equipo nos tenemos que comprometer mucho más. Tanto los problemas defensivos como la falta de gol es culpa de todos”. Y analizó la importancia del apoyo de los hinchas: “La gente tiene que tener paciencia. Si se ponen nerviosos es más difícil para los jugadores”. Y concluyó: “Tenemos que confiar más en nosotros”.

Por otro lado, Riquelme reflexionó acerca de las críticas que reciben los futbolistas del club: "antes, cuando los resultados eran malos los insultos iban al entrenador. Ahora van directo a los jugadores, porque el técnico es intocable, es el mejor de la historia del club".