El encuentro estuvo a poco de suspenderse debido a que el gremio UTEDyC exigía el pago de una deuda que el club mantenía con los empleados (el 37 por ciento del sueldo de marzo).

El conflicto estalló por la mañana y provocó que en las instalaciones del estadio se llevara a cabo una asamblea de los empleados presidida por Rodolfo Hernández, secretario general de Utedyc, aunque por la tarde llegaron a un acuerdo y el encuentro, correspondiente a la trigesimotercera fecha de la B Nacional se jugará en el horario que estaba estipulado.