El empate le bastaba a los marfileños para clasificar pero sobre la hora, un polémico penal, le dio la ventaja a los europeos que convirtieron por primera vez en tres jugos.

Samaris abrió la cuenta al cierre de la primera etapa y parecía encaminar la clasificación, pero a falta de 18 minutos para el cierre del encuentro, Wilfred Bony le daba vida a Costa de Marfil que se veía en Octavos.

Una infantil infracción de Sio sobre Samaras le dio una posibilidad única a Grecia: de los pies del N°7 llegó el 2-1 de penal y la euforia en la agonía. Así, con apenas dos goles en tres partidos -y con estar al frente apenas durante 32 minutos ante los marfileños-, Grecia consiguió su pase a octavos de final. Y su rival será Costa Rica.

Para Costa de Marfil, la desazón fue enorme. No sólo por el fatídico final, sino porque por tercer mundial seguido no pueden avanzar más allá de la primera rueda.

Ahora deberán enfrentar a la sorpresa de la Copa, Costa Rica, el próximo domingo 29 de junio en Recife.