Del Potro afrontó con éxito, aunque no sin sobresaltos, su primer partido oficial del año en césped. Y fue victoria en cuatro sets ante un duro rival, el holandés Robin Haase, que exigió mucho al argentino. El triunfo fue con parciales de 6-4, 3-6, 7-6 y 7-5, en poco más de dos horas y 45 minutos.

En la cancha 2, ante el finalista junior de 2005, Delpo tuvo un muy buen arranque: quebró el juego de servicio del holandés y se puso luego 2-0. A punto estuvo de volver a quebrar inmediatamente, pero el europeo esta vez sí logró escapar del asedio del tandilense. Sin embargo, el daño hecho en ese inicio sólido le alcanzó para llevarse el set por 6-4, en 31 minutos.

En el segundo set, la paridad fue mayor. Hasse subió varios escalones su nivel y exigió mucho más a Del Potro. Tanto fue así que, en el octavo game, y con ayuda del tandilense –doble falta- se puso con tres chances de quebrar. El argentino zafó de dos, pero cedió en la tercera tras un gran punto del europeo, que se puso 5-3 y luego cerró con mucha autoridad.