Del Potro arrancó el partido con autoridad, se le plantó a Federer para demostrarle que esta vez la historia iba a ser diferente, y le quebró tres veces el saque durante el primer set. Apostó por tiros ganadores y forzó errores del suizo que no son habituales, y así se llevó el parcial por 6-3.

En el segundo set, el tandilense siguió firme y en buen nivel, ante un Roger que demostró que es humano, aunque mucha veces su tenis lo convierte en un deportista fuera de lo normal.

En un partido de alto vuelo, el segundo set fue al tie break, donde Del Potro se impuso 7-4. Parecía que lo tenía en jaque, pero Federer siempre tiene un as bajo la manga.

En el tercer set, el tenista suizo reaccionó y sacó su mejor repertorio para dominar de principio a fin. Fue más parecido a todo lo que se había visto en 2012 en los enfrentamientos entre ellos. Y Del Potro no pudo mantener el gran rendimiento de los sets iniciales. Fue un 6-2 contundente para el número 2 del mundo.

El cuarto set mantuvo la misma tendencia: la recuperación de un Federer que nunca abandonó el partido, y un Del Potro que perdió precisión y protagonismo, tal vez por problemas de apoyo sobre la rodilla izquierda.

La Torre bajó los brazos y guardó algo de energías para jugarse sus chances en el quinto y definitivo set. Roger se despachó con un lapidario 6-0.

En el último parcial, el suizo quebró el saque del argentino en el cuarto game, se puso 3-1 arriba, y comenzó a darle forma a un triunfo que a esa altura era inevitable. Del Potro peleó hasta donde pudo, pero el 6-3 inapelable en favor de Federer liquidó el juego

Aunque esta vez el partido fue más disputado, sobre todo en la primera hora y media, Delpo cayó por quinta vez en 2012 ante Federer. Como consuelo al menos, pudo ganarle dos sets, algo que no había logrado en los cuatro partidos anteriores.

En semifinales, el suizo se medirá con el ganador del duelo entre el serbio Novak Djokovic y el francés Jo-Wilfred Tsonga.