"Son un grupo y tienen que bancarse entre ustedes", fueron las palabras del técnico "xeneize" a sus futbolistas en la euforia de la intimidad tras conseguir la primera victoria del Torneo Inicial como local.

Carlos Bianchi llegó al club con la dura misión de recuperar un vestuario en crisis, con peleas internas, divisiones y un presente deportivo flaco. Ocho meses después de su desembarco y luego de un pésimo primer campeonato, el objetivo parece estar cumplido.

El sábado durante la práctica, el entrenador les dijo a los jugadores: "Ahora están bien, se ríen. Ya no tenemos un grupo conflictivo como antes". Las palabras del "Virrey" fueron en clara alusión al pasado.

Tras la victoria con Atlético Rafaela, el DT le hizo un pedido al plantel en el vestuario de la Bombonera. Durante el partido Emmanuel Gigliotti y Juan Sánchez Miño tuvieron un cruce en el terreno de juego y Bianchi actuó: "No se recriminen cosas en público, ayúdense".

Les pidió que se banquen, que sean hermanos. Sin embargo, hay cosas que todavía molestan al entrenador y una de ellas son las constantes filtraciones de lo que pasa en la intimidad del plantel a la prensa.

Por su parte, Emanuel Insúa explicó: "Cuando volví al vestuario me encontré con un grupo muy lindo y unido. Somos todos muy compañeros y tiramos para el mismo lado". Mientras que para Franco Cángele "ahora se nota un poco más la comunicación. La gente se lleva bien, se descomprimió un poco el vestuario".