La eliminación de Independiente a manos de Santa Fe de Colombia determinó el cruce inevitable de Huracán y River en una de las semifinales del torneo, a raíz de la normativa de la Conmebol que así lo indica.

A pesar de no estar establecido en el reglamento, la norma impuesta por la casa madre del fútbol sudamericano apunta que, en caso de que dos equipos de un mismo país lleguen a esa instancia, deberán enfrentarse independientemente de que estén en llaves distintas.

Así ocurrió en este caso. Huracán le ganó a Defensor Sporting de Uruguay y, según el cuadro final del certamen, debía enfrentarse con el ganador de Santa Fe-Independiente. Sin embargo, la derrota del Rojo lo obligó a enfrentarse con River, que clasificó en una llave opuesta.

De esta manera, el Globo y el Millonario estarán frente a frente en una de las semifinales, mientras que la restante albergará el cruce entre Sportivo Luqueño de Paraguay y Santa Fe.