"Es lamentable todo lo que ocurrió, es un papelón mundial. Quiero identificar a esos diez inadaptados", se quejó el máximo dirigente de la entidad xeneize, una hora después de que el partido había sido interrumpido y todavía no había definición respecto de la continuidad o no del encuentro.

"Le pedí disculpas a (Rodolfo) D'Onofrio. No lo puedo creer", dijo el titular de la entidad de la Ribera, que también aclaró que, en turno vespertino, "la gente de seguridad recorrió nuestras oficinas, no había nada", aseguró.
 
Al máximo directivo de Boca se lo pudo ver en la manga junto al presidente de River, Rodolfo D'Onofrio, minutos antes de que los planteles pudieran abandonar el terreno de juego.