Germán Santos, periodista rosarino que trabaja para el Diario La Nación, recibió una llamada de alto voltaje intimidatorio.
 
Santos se especializa en la cruda realidad que vive por estos tiempos la ciudad santafesina, que se vincula a los crímenes y delitos provenientes del narcotráfico.
 
“Encendió mi temor y preocupación por la forma…yo sabía de dónde venía; lo asocio a lo que yo trato en el diario sobre determinados grupos mixtos, con extranjeros. Mi miedo es por la familia, por los que me rodean”, subrayó Germán, quien ahora cuenta con un efectivo de la policía federal que custodia sus movimientos.
 
“Radiqué la denuncia en la justicia federal”, remarcó.
 
“Esto rompió la familia, que se resquebrajó. Fueron tres llamadas”, dijo.