Nadie tiene claro si le habrá servido para comprender que sus acciones o inacciones crearon una masacre en la estación Once de trenes. Pero dicen en la cárcel que el ukelele suena celestial y que los brotes de los malvones son de ensueño.

El ex secretario de Transporte, condenado por la justicia a 5 años y seis meses de prisión por su responsabilidad en la tragedia de Once que costó la vida de decenas de personas, pero ahora, recibió una mas que interesante reducción de 8 meses, en base a sus conocimientos de ukelele.

Segun el informe en que basó el magistrado de ejecución para reducir la condena, los progresos educativos de Schiavi se basaron en su maestría con el ukelele y la botánica, pero también los estudios relacionados a los protocolos de prevención frente al COVID-19. Además desarrolló un complejo curso sobre “elaboración y aromas de vinos caseros”. No hay salida.