Los dos custodios que estaba a cargo de la seguridad del fiscal Alberto Nisman el día que apareció sin vida fueron pasados a disponibilidad, según confirmaron a Télam fuentes del ministerio de Seguridad.
 
Los custodios apartados son el suboficial Armando Niz y el sargento Luis Miño, ambos de la Policía Federal, quienes estaban a cargo de la custodia del fiscal especial para la causa AMIA el día que apareció muerto.
 
"Fueron apartados a partir de las primeras conclusiones arrojadas por el sumario administrativo", indicaron las fuentes a Télam.
 
Además del sumario administrativo, Niz y Miño habían declarado ante la fiscal que lleva el caso, Viviana Fein, y sus exposiciones había reflejado contradicciones.
 
Se trata de los dos custodios que dijeron haber llegado al edificio donde vivía Nisman el domingo 18 a las 11 para encontrarse con el fiscal que, declararon, los había citado.

Los custodios reportaron a sus mandos todo lo ocurrido ese día recién a las 22.40, cuando ya habían ingresado a la casa de Nisman su madre y el juez que intervino en la causa durante el primer día de investigación.