El ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, Guillermo Montenegro, defendió la participación de la Policía Metropolitana en el operativo ordenado por el juez Claudio Bonadío en Río Gallegos, en oficinas de las empresas que administran los hoteles de la familia Kirchner, al sostener que si el magistrado “ordena”, la fuerza lo tiene que “hacer”.
 
“El juez es el director del proceso y es el encargado de elegir qué fuerza llevarán adelante el proceso”, enfatizó quien trabajó muchos años como fiscal y también como juez, antes de asumir como funcionario porteño.
 
Montenegro explicó que es el propio magistrado el que define cuál es la fuerza con “mayor idoneidad” para “cuidar la prueba” de lo que se está investigando.
 
En ese sentido, recordó que “la Policía Metropolitana llevó adelante procedimientos en Mendoza, en Usuahia, en Santa Fe…en más de 100 casos”.
 
Además, explicó que “por ley” la Metropolitana es “auxiliar de la justicia” y se solventa, como es habitual, con los recursos de la Ciudad. Montenegro también aclaró que dicha fuerza, como cualquier otra, no puede negarse a un procedimiento cuando es convocada por un juez. “Tiene que cumplir una orden”, enfatizó.