El Partido Comunista no tendrá como líder a un Castro para que lidere los hilos del país por primera vez en la historia. El ingeniero electrónico de 60 años Miguel Díaz Canel, el número dos del Gobierno cubano desde el año 2013 hasta este lunes , fue elegido como primer secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC) en reemplazo de Raúl Castro.

El señalado por el histórico líder cubano para gobernar la Isla comenzó su carrera política en Villa Clara, su ciudad natal, donde llegó a ser primer secretario del gobernante Partido Comunista de Cuba (PCC, único legal) en los tiempos duros de la crisis de 1990, gestión por la que todavía es recordado y alabado.

La sucesión se produce días después de que Castro, de 89 años, confirmara que dejaba la jefatura del PCC en un paso esperado, pues él mismo impulsó en 2016 la reforma que estableció el límite de dos mandatos de cinco años para los dirigentes comunistas. Junto con Raúl Castro salieron de la cúpula del PCC otros dirigentes históricos como el actual número dos de la formación, José Ramón Machado-Ventura (90), y el comandante Ramiro Valdés (88), además de Marino Murillo, considerado el "zar" de las reformas económicas iniciadas hace una década.

El nuevo Buró Político, cuya composición fue difundida por la prensa estatal cubana —la única con acceso a la cobertura del congreso—, está formado por 14 miembros, tres menos que hasta ahora, y en él se elimina el cargo de segundo secretario.

Entre ellos, destaca la entrada de Luis Alberto López Rodríguez Callejas, presidente ejecutivo del estratégico Grupo de Administración Empresarial (Gaesa), el conglomerado de empresas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) con ramificaciones que van desde el sector hotelero hasta las tiendas minoristas, pasando por los puertos y aduanas.

Miguel Diaz Canel destacó en su primer discurso que Raul Castro “estará siempre presente, bien al tanto de todo, combatiendo con energía, aportando ideas y propósitos a la causa revolucionaria a través de sus consejos, su orientación y su alerta ante cualquier error o deficiencia”.

Asimismo el nuevo primer secretario del Partido ha reiterado la continuidad de la nación desde que asumió la presidencia y no se espera que aleje a Cuba de un sistema socialista unipartidista aunque estará bajo presión para emprender más reformas económicas.

Cuba se enfrenta a una crisis económica luego del recrudecimiento del embargo comercial de Estados Unidos y la propagación de la pandemia, que han intensificado los problemas de su frágil economía de planificación centralizada.

Además la Isla atraviesa una escasez generalizada de productos básicos, como alimentos y medicamentos, que generan filas de varias horas fuera de los puntos de ventas de la nación, pero Díaz-Canel señaló que había demostrado capacidad para resistir una serie de desafíos y preservado logros sociales como la educación y salud universales y gratuitas.

Pero envió un mensaje directo de advertencia a la fragmentada oposición en la isla luego de varias protestas de artistas, pensadores, periodistas, así como otros grupos disidentes. "Es bueno advertir al lumpen mercenario que lucra con el destino de todos, a los que piden invasión ya, a los que continuamente ofenden de palabras y de hechos, a quiénes no descansan, que la paciencia de este pueblo, tiene límites", afirmó.