El Gobierno nacional anunció dos proyectos de ley destinados a captar moneda extranjera no declarada para dinamizar la inversión energética e inmobiliaria, con el objetivo de apuntalar el empleo y el consumo.

Se trata de un certificado (Cedin) de depósitos en dólares que emitirá el Banco Central, orientado a inversiones del sector de la construcción e inmobiliario, y de un bono (Bade), también en dólares, que cotizará en el mercado de capitales con vencimiento en 2016 y que impactará en el sector de infraestructura energética.

Por Continental, el economista del PRO Carlos Melconian consideró que se trata de un “burdo blanqueo de improbables beneficios para la gente. Esto va a contramano del mundo por doble vía: desoye recomendaciones del GAFI y lo hace mientras en el resto de América latina se toman medidas para expulsar dólares porque sobran. Es una clara manifestación de debilidad”.

“Al igual que la Moreno Card, son medidas que se anuncian como grandes soluciones pero impactan poco en el día a día. Encima, la lanzan en medio de un escándalo por desvío de fondos públicos. Parece una tomada de pelo, qué poco tacto”, se indignó en Magdalena Tempranísimo.

“Estas medidas no atacan la raíz del problema. Se perdió el superávit fiscal, cambiario, comercial y energético. Hay que enfocarse a esto porque es lo que afecta los flujos de la economía, lo que le da sostenibilidad y dinámica hacia adelante”, argumentó Melconian.