En el momento en que comenzaba el juicio por el asesinato de Mariano Ferreyra, la Presidente contó detalles acerca de las primeras horas de investigación y recordó cuánto había afectado el crimen a Néstor Kirchner, quien falleció siete días después del hecho.

La jefa de Estado recordó que el ataque de una patota sindical que acabó con la vida del joven militante del Partido Obrero "había afectado muchísimo" al ex mandatario. "Mi hijo (Máximo Kirchner) siempre dice que la bala que mató a Mariano Ferreyra rozó el corazón de su padre", reveló.

En ese sentido, Cristina Fernández reveló que la investigación "pudo iniciarse gracias a la colaboración de un intendente del gran Buenos Aires" que "acercó a un testigo y se lo presentó a Néstor". Aunque evitó develar quién fue el jefe comunal, la mandataria destacó su colaboración.

"Esa tarde me llamó por teléfono que estaba con el intendente esa persona que quería hablar, por eso la llevamos a Olivos, le pusimos custodia, y luego la llevamos a la jueza de la causa. Fuimos nosotros los que llevamos a ese testigo, mucha gente trabajó sin parar. Tengo que contar esto porque así se definió el juicio que comienza hoy", sostuvo la Presidente.

Cristina Kirchner descartó así que hubiese habido cualquier tipo de colaboración con la Unión Ferroviaria o su titular, José Pedraza, quien está acusado de ser el autor intelectual del crimen.

Mariano Ferreyra murió el 20 de octubre del 2011, cuando acompañaba a un grupo de trabajadores ferroviarios tercerizados durante un corte de vías en el ferrocarril Roca. Allí acudió una patota encabezada por sindicalistas de la Unión Ferroviaria y barrabravas, quienes atacaron a tiros a los manifestantes, asesinando al joven militante del Partido Obrero e hiriendo de gravedad a Elsa Rodríguez.