“Argentina no quiere ser un caso de estudio para los libros de textos sobre cómo sufrió una nación; lo que necesitamos es que la comunidad internacional actúe y que sea pronto, antes de que el precipicio que estableció el juez Griesa esté ante nuestras narices”, enfatizó el ministro de Economía de la Nación, Axel Kicillof.
 
“Nos respaldó Estados Unidos, Uruguay, el Fondo Monetario, el ALBA, la Celac, del Reino Unido. También recibimos apoyo de Bolivia, Ecuador, Chile y de los 77 países más China. Agradece la República Argentina”
 
“El fallo es injusto y desquiciado”, subrayó Kicillof, quien aseguró que “la reestructuración de deuda no es un problema de la Argentina sino mundial, a raíz del capitalismo” vigente.
 
El funcionario de Hacienda sostuvo que “Argentina será la primera víctima” de una consecuencia en cadena que no permita seguir reestructurando deudas, si el fallo de Griesa sigue vigente tal cual está. 

Axel Kicillof afirmó que nuestra nación "está comprometida con el diálogo y quiere negociar en igualdad de condiciones", al confirmar que el Gobierno argentino va a hablar con el delegado del juez Thomas Griesa en la audiencia prevista para el lunes con los holdouts.
 
"Le pedimos al mundo y a la OEA que tome cartas en el asunto y acompañe a la Argentina en evitar que un juez ponga en riesgo todo lo que la Argentina hizo para levantarse", planteó Kicillof en la reunión de consulta de cancilleres del continente de la que participó junto al canciller Héctor Timerman.