El actual diputado por la UCR se vio forzado a renunciar a la Fiscalía de Investigaciones Administrativas, allá por 2009, luego de que el propio Righi le aplicara un recorte en sus funciones. En ese entonces, Garrido investigaba, entre otros temas, el presunto enriquecimiento ilícito de los Kirchner.

"Con Graciela Ocaña vamos a pedir una auditoría al Consejo de la Magistratura y a la Corte Suprema para que se busquen todas las causas en las que intervino el estudio Righi y ver cuáles fueron los resultados", sostuvo el ex titular de la Fiscalía Nacional de Investigaciones Administrativas.

Garrido recordó que el propio Boudou, que se encuentra sospechado de tráfico de influencias en el caso Ciccone, por gestiones que habría realizado en favor de la imprenta, "terminó haciendo la denuncia" contra el estudio integrado por parientes y allegados a Righi "porque sabía que estaba en falta de que no la había denunciado en su momento y para cubrirse de posteriores acusaciones que le podían llegar".