La presidenta Cristina Fernández resaltó este miércoles que “es imposible integrarse al mundo si no se está integrado regionalmente”, al encabezar la 47°Cumbre de Jefes y Jefas de Estado del Mercosur, y remarcó que "no puede haber desarrollo ni crecimiento si no es de carácter inclusivo".
 
En la Cumbre que se desarrolla en la ciudad entrerriana de Paraná, Cristina destacó el potencial del Mercosur en materia de recursos humanos y naturales que lo convierte en “un lugar de privilegio en el mundo” y señaló la necesidad de la integración de los países, que es "altamente beneficiosa para los pueblos, fundamentalmente para los sectores más vulnerables y los que necesitan mayor presencia del Estado".
 
Desde el centro de convenciones de La Vieja Usina de Paraná, Entre Ríos, la Presidenta sostuvo que profundizar la inclusión es "inteligencia económica, porque cuando más se ha crecido es cuando mayor cantidad de gente se ha incorporado al consumo, al trabajo y a la promoción".
 
"Esa es la clave para el crecimiento del país y para estar fortalecido a la hora de la integración", que "no puede confundirse con la subordinación", afirmó.
 
En ese sentido, destacó los avances de la integración regional, logrados no sin “dificultades o diferencias”, y reconoció que los bloques regionales “no pueden ser un obstáculo para integrarse al mundo” y consideró que el intercambio comercial por fuera del Mercosur “no significa renegar a otras áreas más consolidadas”, pero señaló que esos intercambios no pueden darse “en detrimento de nuestra región”.
 
Durante su discurso, la Presidenta reivindicó las bandera históricas del peronismo contenidas en las consignas “justicia social, soberanía política e independencia económica”, aunque propuso que este último concepto debería ser reemplazado por la “autonomía política”, y señaló que debería ocurrir lo mismo con el tercer concepto, la “justicia social”, y reemplazarlo por la “igualdad social” dado que ese término histórico se refiere a “un estado en el que todos han tenido lo que le corresponde, y ni en mi país ni en ninguno de los países del mundo se ha logrado” una situación así.
 
Otro de los tramos de su exposición estuvo dedicado a agradecer el apoyo del Mercosur a la Argentina en la disputa con los fondos buitre y aseguró que nuestro país "se está defendiendo del ataque de especuladores” que apuestan a comprar papeles en default, algo que está prohibido en Inglaterra, Luxemburgo y en Bélgica.
 
La Presidenta dijo que se trata de “buitres un tanto desplumados”, y describió a las audiencias realizadas la semana pasada en el estado norteamericano de Nevada como “surrealistas, llevadas a cabo dentro de un casino, entre ruletas y cowboys”.
 
En este sentido, aseguró que nuestro país “se está defendiendo de un ataque de especuladores que apuestan a comprar papeles en default”, prácticas que “en Inglaterra, en Luxemburgo y Bélgica están prohibidas”, y pidió que los países del bloque “no hagamos como los que hacen como cangrejo, y caminemos para adelante”.
 
A su vez, Cristina explicó que "el manejo del precio del petróleo ejemplifica que el mercado es un maravilloso eufemismo que se halló para ocultar las razones geopolíticas y los intereses de otros países", ya que remarcó que "el mercado es un conjunto de grandes empresas que en algún momento se reúnen y toman decisiones que impactan en la política".
 
Las palabras de la jefa de Estado llegaron después del repaso que realizó el canciller Héctor Timerman por el semestre en el que Argentina ejerció la presidencia pro témpore del Mercosur, donde remarcó que se trabajó para "asegurar la vitalidad institucional del bloque" y subrayó que "para Argentina el Mercosur es una política de Estado".
 
La mandataria, que había llegado anoche a Entre Ríos, acompañada por el secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro, y una comitiva integrada por el Jefe de Gabinete, Jorge Capitanich; el ministro de Economía, Axel Kicillof; el titular del Banco Central, Alejandro Vanoli; y el dirigente radical Leopoldo Moreau, entre otros, agradeció la organización y la cálida bienvenida al gobernador Sergio Urribarri.
 
Antes habían llegado los presidentes de Bolvia, Evo Morales; de Venezuela, Nicolás Maduro; de Uruguay, José Mujica y hoy lo hizo la mandataria de Brasil, Dilma Rousseff, que recibirá en esta cumbre la presidencia pro témpore del bloque regional.