Es una semana a todo vapor en el Congreso de la Nación, con ambas Cámaras trabajando en paralelo buscando darle sanción a las leyes que el gobierno necesita o las que el oficialismo requiere para sus fines.

En el Senado, avanza sin oposición la iniciativa mandada por el Poder Ejecutivo para delegarle facultades que le permitan "manejar la pandemia", un proyecto que, ya avisó la Corte Suprema, tendría problemas de constitucionalidad, porque propone que el Congreso delegue facultades que no le son propias, son exclusivas de las provincias.

Pero el gobierno cree que doblegará a varios gobernadores con ella, de hecho, durante el fin de semana el gobernador radical de Jujuy, Gerardo Morales, adelantó que el no hubiese ido a la Corte como hizo el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta. Si no lo hubiese hecho con el DNU, mucho menos seguramente lo haga con una ley.

Por el lado de la Cámara de Diutados lo que toma fuerza esta semana y mañana se debatirá en Comisión es el proyecto de ley que modifica las mayorías necesarias para designar al Procurador General de la Nación.

Desde el comienzo de la gestión, el oficialismo ha estado tratando de nombrar nuevo Procurador, pero el requisito impuesto de los dos tercios, se lo ha impedido. La solución pensada es sencilla: modificar la ley que requiere dos tercios y establecer que tal designación se haga por mayoría simple.

Como en todo este tipo de normas que necesitan de mayorías especiales, el oficialismo necesitará del bloque que responde a Roberto Lavagna para darle sanción a la norma, algo que suele conseguir sin demasiadas concesiones ni esfuerzo.

De todas formas lo debates van a ser activos y van a otorgarle también, tribuna a la oposición, que no tiene muchos mas recursos que "patalear", frente a un Poder Legislativo controlado por el oficialismo.