A partir de la promulgación de esta norma, el Poder Ejecutivo, a través del Ministerio de Economía, tendrá la potestad para controlar el mercado, estableciendo precios de venta y metas de producción sobre la empresa Papel Prensa, y aplicar sanciones que pueden llegar hasta la confiscación de la firma ante el incumplimiento de sus directivas.

La ley fue aprobada por 41 votos a favor, 26 en contra y la abstención de Agustín Pérez Alsina (Partido Renovador de Salta). Además del kirchnerismo, que tuvo la asistencia perfecta de sus 33 senadores, la norma fue apoyada por los fueguinos de Nuevo Encuentro, el Movimiento Popular Neuquino, los peronistas Carlos Menem (La Rioja), Roxana Latorre (Santa Fe) y María Higonet (La Pampa), el radical independiente José Roldán (Corrientes) y el porteño Samuel Cabanchik.

Votaron en contra el radicalismo, el peronismo disidente y el Frente Amplio Progresista (FAP). "El oficialismo eligió avanzar en un enfrentamiento contra empresas y no en el camino de ampliar un derecho y garantizar el acceso a ese derecho", denunció Ernesto Sanz (UCR-Mendoza).

Según el texto de la ley sancionada el jueves, el marco regulatorio tiene por objeto "asegurar para la industria nacional la fabricación, comercialización y distribución regular y confiable de pasta celulosa para papel de diario".

Entre otras cuestiones, el proyecto establece la creación de una comisión bicameral de seguimiento de la fabricación, comercialización y distribución de la pasta de celulosa y papel, integrada por ocho senadores y ocho diputados de diferentes bloques parlamentarios.

Dispone además que el Ministerio de Economía será la autoridad de aplicación de la norma, el cual tendrá a su cargo controlar el marco regulatorio, y contará con el asesoramiento de una Comisión Federal Asesora, integrada por un representante de los diarios de cada provincia; uno de las entidades de consumidores y 3 de los trabajadores.

Asimismo, en uno de sus últimos artículos, el texto establece que la empresa Papel Prensa "deberá operar a pleno de su capacidad operativa o de la demanda interna de papel" y presentar cada tres años un plan de inversiones tendientes a satisfacer la demanda interna de papel de diarios.