Las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) que se realizaron el domingo pasado en Santa Fe cayeron bajo un manto de sospechas luego de que se supiera que el resultado provisorio anunciado el domingo por la noche, con un empate técnico irreversible entre el Frente Progresista y el PRO, omite 807 mesas, es decir 10 por ciento del total. Por Continental, Claudia Calatín, secretaria electoral provincial, reconoció que 657 no fueron recibidas y que en otras 150 había errores en el telegrama. 

En La Mirada Despierta, admitió que "va a haber modificaciones en el resultado provisorio" y que "a los candidatos los vamos a conocer cuando tengamos el resultado definitivo". Catalín recordó que "el escrutinio provisorio no tiene valor legal, sí el definitivo que comienza hoy. Es grave lanzar sospechas sobre algo que no es definitivo", se atajó.

Desde varios sectores se escucharon reclamos. El Frente Social y Popular (FSP), un sector de la izquierda rosarina, denunció que "el gobierno provincial fraguó los números en la categoría concejal por Rosario" para "dejar afuera de las elecciones de junio a Celeste Lepratti", hermana del dirigente Social Pocho Lepratti, asesinado en los hechos de violencia registrados en 2001. "Hay datos objetivos que nos dan fundamentos para dudar del resultado de las elecciones primarias difundido oficialmente", sostuvo Héctor Cavallero, ex intendente de Rosario y cabeza de la lista de diputados provinciales del Frente Justicialista para la Victoria. A su vez, el diputado provincial Roberto Mirabella, cercano al candidato a gobernador, Omar Perotti, aseguró que no se contabilizaron 734 mesas sobre 7628, lo que representa más de un 10 por ciento del total. "Hay 52000 votos no consignados en el escrutinio a gobernador", dijo el legislador.