La Cámara Federal de Casación Penal confirmó este lunes al juez Ariel Lijo al frente de la causa Ciccone, al rechazar por "inadmisible" un pedido del empresario Nicolás Ciccone para apartarlo del expediente por "temor de parcialidad".
 
La Sala IV de la Cámara Federal de Casación Penal -integrada por los jueces Mariano Borinsky, Juan Carlos Gemignani y Gustavo Hornos- dispuso por unanimidad declarar inadmisible el recurso y ahora debe resolver si confirma o revoca el procesamiento del vicepresidente Amado Boudou y del resto de los acusados.
 
Si Casación confirma los procesamientos -tiene plazo legal hasta este jueves-, Boudou y los demás acusados quedarán en condiciones de ser enviados a juicio oral, si así lo dispone el juez Lijo.
 
La defensa de Ciccone pretendía el apartamiento del juez que investiga la causa en base a una serie de notas periodísticas donde se señalaba que había una relación entre el abogado comercial de la familia Ciccone, Marcelo Ruiz, y el abogado Alfredo Lijo, hermano del responsable del expediente por el salvataje supuestamente anómalo de la imprenta.
 
Los abogados del empresario, Maximiliano Rusconi y Gabriel Palmeiro, señalaron que existía un temor de parcialidad por parte de Lijo porque primero aceptó a Ciccone como querellante en la causa pero luego, cuando trascendió que Boudou podría recusarlo por su relación con Ruiz, le quitó ese rol y lo puso como acusado.
 
Primero Lijo fue confirmado por la Cámara Federal y ahora por Casación, que consideró "inadmisible" el planteo de la defensa del empresario Ciccone, quien también está procesado en la causa.
 
Los camaristas Borinsky, Gemignani y Hornos no trataron los argumentos de la defensa del cofundador de la ex Ciccone Calcográfica (actual Compañía de Valores Sudamericana), sino señalaron que las recusaciones no es un tema en los que debe intervenir Casación.
 
Ahora Casación tiene que resolver una serie de nulidades que presentaron las defensas y los procesamientos de todos los acusados.
 
Junto con Boudou y Ciccone también están procesados el socio y amigo del vicepresidente, José María Núñez Carmona; el dueño de "The Old Fund" (controlante de la imprenta), Alejandro Vandenbroele; el directivo de la AFIP Rafael Resnick Brenner y el ex funcionario del Ministerio de Economía y del Banco Mundial Guido Forcieri.
 
Si Casación confirma los procesamientos, quedarán en condiciones de ser enviados a juicio oral y público.
Sin embargo, esa es una decisión que debe tomar el juez Lijo porque la Cámara Federal le ordenó investigar a otras personas.
 
Lijo deberá resolver si divide la causa y la envía a juicio en tandas o si espera a terminar la investigación sobre el resto de las personas y luego eleva a todos los acusados juntos.

Casación tiene plazo para resolver si confirma los procesamientos hasta este jueves, ya que vencen los 20 días hábiles que el Código otorga desde que realizó la audiencia oral con todas las partes de la causa. Ese plazo no es taxativo y depende de cada tribunal y de cada causa si es respetado.

El juez Lijo dio por acreditado que Boudou utilizó su cargo de ministro de Economía en 2010 para influenciar en el levantamiento de la quiebra de la ex Ciccone Calcográfica, que atravesaba una mala situación económica, y quedarse con el 70 por ciento de las acciones de la empresa a través de "The Old Fund".
 
El vicepresidente está procesado por negociaciones incompatibles con la función pública y cohecho pasivo, que fue, según la Justicia, el recibir como coima un porcentaje de la empresa.