La presidente advirtió en su último discurso que hoy “nadie puede desaparecer de ningún lado”, en alusión a la dictadura Argentina. Sin embargo, desde diferentes sectores consideraron poco atinada la afirmación de la jefa de Estado, quien se pronunció de esa forma en la Universidad de La Plata.

Precisamente en esa localidad, “desde el 2006, Julio López nunca volvió a su casa”, remarcó Miryam Bregman, abogada de la familia del albañil, uno de los testigos claves en un juicio por delitos de lesa humanidad.