Después de cinco años de pelea en los tribunales, el juez dictó sentencia: Angelina Jolie y Brad Pitt tendrán la custodia compartida de cinco de sus seis hijos (con la excepción de Maddox, quien ya es mayor de edad).

Pitt se impuso a la voluntad de Jolie de quedarse con la custodia en exclusiva de los menores. A la actriz de 45 años le molestó no poder ver declarar a sus hijos ante la justicia, dado que sus testimonios acerca de la violencia doméstica que arguye que ha ejercido Brad Pitt en el pasado, y que él mismo ha admitido fruto de sus abusos de alcohol y drogas.

No obstante el juez Ouderkirk ha tomado la decisión basándose en los testimonios de personas del entorno de la familia y de los profesionales de servicios infantiles que entrevistaron a los niños.