El jefe de Gabinete de la Nación, Juan Manuel Abal Medina, condenó “la metodología” del paro antikirchnerista, pero reiteró que “el Gobierno no va a reprimir la protesta”.

En La Mañana, criticó la implementación de piquetes en los accesos a la ciudad de Buenos Aires y otros puntos del país como Rosario.

“No se trata de una huelga, sino de piquetes que les impiden a los trabajadores llegar a sus lugares de trabajo. No hay una huelga, sino un piquetazo nacional”, argumentó.

Además, fustigó los “actos de vandalismo” contra trabajadores que no querían ir a la huelga y comercios que abrieron sus puertas. “Este paro sólo sirve para posicionar a un grupo de dirigentes para quedar bien con algún multimedio”, minimizó.