El Congreso de Paraguay aprobó una ley que modifica el Código Penal para endurecer las sanciones por la ocupación de tierras de propiedad privada. La medida afectaría a varias comunidades indígenas que residen en asentamientos improvisados a la espera de la restitución de sus tierras. Ahora las penas podrían aumentar hasta 10 años de prisión. Debido a esta nueva ley, en las afueras del Congreso, grupos que se oponían a la medida marcharon, quemaron autos y se enfrentaron con la Policía. Según los informes oficiales, ocho oficiales y un manifestante resultaron heridos en los enfrentamientos.