Lofven sustituye en el cargo al conservador Fredrik Reinfeldt.

El sistema sueco establece que no es necesario recibir el apoyo de la mayoría absoluta de la Cámara para ser elegido primer ministro, sino que basta con que no haya una mayoría en contra.

Tal como estaba previsto, la Alianza de centroderecha que dirigió el país los últimos ocho años se abstuvo con el objetivo de minimizar la influencia del ultraderechista Demócratas de Suecia (SD), tercera fuerza parlamentaria y la única que votó en contra de Lofven.

Similar postura abstencionista tomó el Partido de la Izquierda por la decisión de Lofven de excluirlo del nuevo Gobierno, lo que convertirá a esta formación en una alternativa de izquierda en la oposición que puede hacer pactos puntuales con el Ejecutivo, según resaltó hoy en la Cámara el líder de su grupo parlamentario, Hans Linde.

En su momento, el líder socialdemócrata justificó su rechazo a que los socialistas se integraran en la coalición de Gobierno por una pretendida intención de romper la política de bloques y lograr pactos con el centroderecha.

Luego de la votación, el flamante primer ministro señaló a la desocupación, la educación y el sistema de bienestar como áreas prioritarias para la nueva administración, previo a que este viernes presentará el nuevo Gobierno, del que por primera vez formarán parte los ecologistas suecos y que cuenta con sólo 138 de los 349 escaños.

Socialdemócratas y verdes ya alcanzaron acuerdos en varios temas espinosos, como defensa y energía nuclear.

Los observadores de la política sueca, que no presenta las alteraciones comunes en algunos de sus vecinos europeos, indicaron que el principal problema que afrontará el nuevo Gobierno es la aprobación de sus primeros presupuestos.

En este sentido, destacó la agencia EFE, Lofven necesitará al menos de los votos del Partido de la Izquierda y que la ultraderecha no apoye la moción alternativa que la Alianza ya anunció que presentará.

La izquierda ganó las pasadas elecciones del 14 de septiembre con el 43,7% de los votos frente al 39,3% del centroderecha y el 12,9% de Demócratas de Suecia.

Lofven, un ex soldador nacido en Estocolmo hace 54 años, es un líder atípico ya que carece de experiencia parlamentaria y ministerial, aunque sí posee una amplia trayectoria en el mundo sindical que lo llevó en 2005 a presidir el poderoso IF Metall, estrechamente ligado a la socialdemocracia.

Fue elegido en enero de 2012 nuevo líder del partido en lugar de Hakan Juholt, quien había dimitido menos de un año después de sustituir en el cargo a Mona Sahlin.