Rusia ha seguido intentando atacar la infraestructura energética de Ucrania, pero las fuerzas de Vladimir Putin no parecen haber tenido ningún éxito significativo.

Un misil dañó gravemente una instalación energética clave en la región alrededor de la capital de Ucrania y 10 misiles y cuatro drones alcanzaron ubicaciones en la ciudad suroriental de Zaporizhzhia.